Una vez hecha la referencia obligada a Gauss en éste espacio, curiosamente él se relaciona en la actualidad con Alexander von Humboldt a través de un best seller de moda. Die Vermessung der Welt (la medición del mundo). Dije curiosamente por que a nivel personal puedo relacionar ambos personajes también: Al día siguiente de escribir sobre Gauss sigo la ruta de Humboldt y me dirijo a Tenerife, aunque en éstos tiempos de la influenza aviar post-modernos Tenerife no es lo que Humboldt vió. Tampoco me importaba mucho, por que no fué él quién me inspiró a emprender éste viaje, si no las revistas españolas Interviú y Diez Minutos que leía hace casi 20 años en mis ratos de ocio y me forjaron la imagén de Tenerife como lo más cercano al paraíso sobre la tierra.
Hoy en día Tenerife es un destino turístico cien por ciento. Era consiente de ello desde el momento de reservar los boletos. Pero nunca me imaginé a que grado. Poblados enteros han sido engullidos por los complejos turísticos. Por momentos hasta me parecía no haber salido de Alemania. Todo estaba en alemán, no había la mínima necesidad de hablar en español. Aunque igualmente visitantes de Inglaterra y Holanda se habrán sentido en casa.
Si bien es cierto que la industria turística mueve a la isla en más de un sentido, también lo es que no ha perdido su belleza natural. Basta sentir la presencia del imponente pico del Teide para darse cuenta de ello, o contemplar la variedad de flora (con los cactus que tanto aprecio y considero mis cuates) , o buscar sirenas al pie de los acantilados de los Gigantes y deleitarse con las playas de arena negra entre otras muchas cosas.
Lo mas importante de todo: Es posible encontrar sitios hermosos e interesantes alejados de ese pelotón multicolor de turistas. Esa era nuestra misión.