Yo llegué tardé. Para ser precisos 10 años tarde. Me hubiera gustado estar ahí para manotear de alegría sobre el toldo de aquellos Trabis que se atravesaban los resquicios recién abiertos del otrora inexpugnable muro, y beber con los conductores un trago de champaña, así como presenciar los fuegos de artificio al pié de la…
De objetos perdidos y hallazgos repentinos
En algún lugar del mundo debe existir una gran bodega de dimensiones inconmensurables, dónde se encuentren todos los objetos perdidos. Estantes enormes repletos de toda clase de artefactos: llaves, paraguas, maletas, lapices labiales, calculadoras de bolsillo, computadoras, calcetines, teléfonos móviles, televisiones y hasta carriolas. En ese sitio debe trabajar un dependiente enjuto y encorvado que…
La casa del castillo o la añoranza por la lejanía
Entre los niños que vivían en la calle de aquél fraccionamiento suburbano en la que pasé mi infancia existía un mito: Si uno se alejaba lo suficiente de los límites que nuestros padres nos habían señalado para no traspasarlos mientras jugábamos por las tardes, existía un camino que conducía al fraccionamiento vecino, dónde se decía…
Contacto sobrenatural: Aullidos finales
Antes de proceder a leer el texto siguiente, se recomienda leer las dos primeras partes de la historia: 1.Contacto sobrenatural con Liza 2.El arqueólogo Habíamos programado la siguiente sesión en mi casa para la semana siguiente. Tenía el tiempo a mi favor, dado que no habían pasado 24 horas desde la sesión en casa de…
Contacto sobrenatural: El arqueólogo
Así empezaron las cosas (primera parte de la historia). A la mañana siguiente desperté con una fuerte resaca, aunque ni la noche anterior, ni en los años que llevaba hasta entonces vividos había bebido una gota de alcohol. Más bien era a causa de todas las emociones del día anterior en las que me había…
Contacto sobrenatural
Corría el año del señor 1995. Entonces era yo un nerd bien hecho. Lo digo sin empacho: portaba lentes del grueso del fondo de una botella, me peinaba con una raya de lado, y me enjaretaba una camisa cuadrada todos los días. Aunque mi calculadora programable no tenía nombre de mujer…aún. Si a esa apariencia…
Roland
El vigía y guardián de la ciudad de Bremen con la mirada en un blanco meditativo me recibió cordialmente. Desde hace años lo había querido visitar, siendo hasta este verano que me presenté ante él para reverenciarlo. Decidí hacerlo mientras visitaba aquél otro Roland en Eschborn, justo a las afueras de Frankurt. Roland es un…
En un mercado medieval
Que las noches sean ya mas largas que los días dan testimonio que el verano nos dejó. He aquí pues una de sus coloridas estampas: Una tarde de verano en un mercado medieval. La brisa anuncia lluvia. Nos refugiamos en un moka con cardamomo al puro estilo árabe al pie del palacete de Brunswick. La…
De como Alioth conoce a Nihao
“¿Debo ir?” Me preguntaba incesantemente. La inmovilidad de mi madre a causa de la artritis, el reciente deceso de su hermana Celia y la ruptura con mi entonces novia me reprimían para concretar el sueño de “ir a la tierra del poeta”. Siendo un niño de 10 años, descubrí entre los discos de mi padre…
Una reunión genial
La dos de la tarde de un jueves soleado. Es la hora de la reunión del equipo de diseño. Llego puntual a la sala de juntas “Gauss” que está desierta prácticamente. Tan sólo un puñado de sillas están ocupadas. Franz, de pié frente al atril y con la presentación ya lista, bromea con los presentes….